POR AMOR AL ARTE

vero,pancho,rebeca, consuelo,gabriel, alfonso, constanza (yo)

fotos de gabriel bunster

mis bototos se las traen. ayer descubrieron que ademas de callejear, les gusta la montana. toda una sorpresa mis bototos.

una sorpresa porque nunca me imagine que duraria cuatro horas de trekking sin haberlo hecho en meses y un regalo porque me uni a un grupo fabuloso de amantes de subir los cerros de santiago y sus alrededores gruposubecerro

los que vivimos aqui en pleno julio sabemos el frio y la humedad que hay a las ocho de la manana, hecho que se acentua los domingos cuando una ha esperado toda la semana para quedarse flojeando en la camita, en pyjamas todo el dia, regaloneando con la almohada. asi que levantarse fue el primer gran desafio.  entre bostezos y las dudas sobre en lo que me estaba metiendo, llegamos al segundo gran desafio, la primera etapa del cerro, un roquerio con cadenas que de buenas a primeras amenazo con mandarme directo al hospital con multiples quebraduras. se pudo entre puteadas y garabatos, lo que los subcerristas llaman sacar rapidito a Mr.Hyde.

mientras en santiago llovia, subiamos hacia un cielo azul pristino con una pequena brisa, cero frio y unas vistas divinas. sobrevolo un condor seguro a darme la bienvenida a su habitat.  alfonso me presto uno de sus bastones, mi amigo mas fiel de la aventura. caminamos dos horas hacia la cima donde,sorprendentemente, habia una planicie perfecta para sentarse a merendiar y echarse un rato a mirar ese cielo.yo simplemente lo observaba todo y lo procesaba como una gran suerte de la fortuna gracias al tezon de mi amigui rebeca y mis bototos.

alfonso tenia todos los gadgets imaginables para la aventura

subimos y bajamos en cuatro horas, yo por supuesto la ultima en llegar, casi arrastrandome pero aun sonriendo porque la meta se cumplio.justo a tiempo para correr a casa a ver el mundial de futbol en medio de un almuerzo exquisito de salmon teriyaki y saltarse el frio infernal que siguio.

hoy,a pesar de molida y con el cuerpo adolorido, cuido esa memoria. me la podre el proximo? you bet!

ay, la naturaleza